Usar Olla Cocción Lenta

CÓMO UTILIZAR UNA OLLA DE COCCIÓN LENTA

¿Quieres comprarte una olla de cocción lenta pero no estás seguro de cómo se usa? ¿Te has comprado tu primera olla pero tienes dudas sobre cómo empezar a utilizarla? No te preocupes, nosotros resolvemos tus preguntas.

Contenidos


¿Qué ajuste debo utilizar?

Las ollas de cocción lenta suelen tener varios ajustes para que utilices el más conveniente con la receta que estés preparando. Vamos a repasarlos.


  • Alto / High
  • Este ajuste utiliza una temperatura más alta para cocinar. En consecuencia es el modo en el que cocina el plato más rápido.


  • Bajo / Low
  • Es el modo ideal para platos que requieran un cocinado lento y prolongado y tiene la ventaja de que ofrece un consumo de energía ciertamente moderado.


  • Auto
  • Es un modo perfecto si quieres que la olla cocine prácticamente sin supervisión. Comienza la cocción a potencia alta y pasa a potencia baja al cabo de un tiempo determinado. Si tu modelo lo incluye, una vez terminada la cocción pasará al modo de mantenimiento de calor (que veremos a continuación).


  • Mantener caliente
  • Es una función de gran utilidad si el plato se va a consumir algún tiempo después de cocinado. Esta función mantendrá la temperatura, asegurando la correcta conservación de los alimentos y evitando que el plato se enfríe y se reseque.


    ¿Qué tamaño debo elegir?

    Las ollas de cocción lenta se venden en varios tamaños, y en esto no difieren de una olla tradicional: debes elegir aquella que mejor se adapte a tus necesidades. Si eres una persona sola, o buscas una olla para ti y tu pareja, con una olla pequeña de hasta 3,5 litros deberías tener suficiente.

    Si en cambio cocinas para una familia de varios miembros, dispones de ollas de mayor tamaño. Y si te gusta cocinar para invitados o buscas una olla para una familia numerosa, puedes encontrar ollas de gran capacidad, llegando hasta los 7,5 litros.

    También deberás escoger la forma de tu olla. Las ollas redondas son ideales para sopas y platos de cuchara. Si buscas una olla que también sea capaz de cocinar piezas de carne de cierto tamaño, como un pollo entero, por ejemplo, probablemente te intereserá más optar por una de forma ovalada.


    El temporizador

    Una de las ventajas más interesantes que ofrece un slow cooker radica en la posibilidad de planificar la cocción para hacerla coincidir con el momento de la comida. Algunas ollas disponen de temporizadores digitales que permiten ajustar el tiempo de cocción en cada modo. Otras incluso cuentan con conexión Wifi que te permitirán controlar el aparato desde el móvil.

    Para las ollas que no cuentan con un temporizador digital, existe la alternativa de conectarlas a un temporizador programable independiente. Sin embargo esta es una opción menos recomendable por los inconvenientes inherentes a este tipo de temporizadores. Si decides emplear uno, no dejes de repasar las medidas de seguridad para este tipo de aparatos.

    Al programar el temporizador, es recomendable que no dejes los alimentos un tiempo excesivo en la olla antes de comenzar la cocción. Te aconsejamos que no dejes los alimentos en el interior del slow cooker durante más de dos horas antes de empezar a cocinarlos.

    De igual modo, también es aconsejable no prolongar en exceso el uso de la función de Mantener caliente. En principio debería mantener la comida en una temperatura superior a la franja más peligrosa para la proliferación de bacterias, pero a cambio un tiempo excesivo en esta función puede llegar a afectar a la textura o al sabor o cocer en exceso el plato. ¿Nuestra recomendación? Intenta limitar su uso a un máximo de dos horas.


    Cuidados a la hora de cocinar

  • Presta atención a los niveles.
  • No llenes demasiado la olla. Una de las principales cosas que deberás observar es que los niveles de alimentos y líquidos sean los correctos para que el calor se distribuya de manera uniforme y la temperatura se mantenga constante.


  • Procura no levantar la tapa.
  • La cocción en un slow cooker depende del calor y del vapor. Cada vez que levantas la tapa, parte del calor y del vapor escapará de su interior, de manera que debes tratar de evitarlo. ¿Qué hacer si quieres revisar cómo va la cocción? Lo más sencillo es que elijas un modelo que tenga la tapa de cristal. De este modo podrás ver qué ocurre en el interior de tu olla sin necesidad de destaparla.


  • Recuerda colocar los ingredientes en capas.
  • Habitualmente, la mejor manera de distribuir los ingredientes es colocando las verduras sólidas como zanahorias o patatas en el fondo, las piezas de carne encima de ellas y en la capa superior, las verduras más ligeras.


  • Vigila la cantidad de líquido de tu receta.
  • La cocción en una olla de cocción lenta depende del vapor. Por ello, están diseñadas para minimizar el nivel de vapor que puede escapar del aparato. Debes incluir una cierta cantidad de líquido para asegurar que el plato se cocine correctamente pero un exceso resultará contraproducente.


  • Vigila el uso de especias.
  • La cocción lenta potencia el aroma y el sabor de las especias. Ajusta la cantidad que añadas al plato teniendo esto en cuenta.


  • Ojo con los lácteos.
  • Si tu receta incluye productos lácteos, te recomendamos que los añadas en el tramo final de la cocción. Si los incluyes demasiado pronto cabe la posibilidad de que se cuajen.


  • El refrigerador es tu amigo.
  • Si quieres dejar tu olla funcionando cuando sales por la mañana con la idea de llegar a casa a la hora de la comida con todo listo para consumir, puedes preparar todos los ingredientes que necesitarás la noche anterior, dejarlos colocados en el recipiente y guardarlos en la nevera hasta la mañana siguiente. Así sólo tendrás que colocar la cazuela en su lugar y conectar el aparato antes de irte.


  • Uso de alimentos congelados.
  • Nuestro consejo es tratar de evitar el uso de alimentos congelados con tu olla de cocción lenta en la medida de lo posible. La razón es que dada la temperatura de congelación, es posible que el calor de la olla no alcance el nivel suficiente de seguridad para la eliminación de bacterias a través de la cocción.


    En resumen

    Las ollas de cocción lenta son un electrodoméstico increíblemente práctico y resultan muy sencillas de utilizar. Lee con atención el manual de tu olla y no te olvides de tomar nota de los tiempos y resultados las primeras veces que cocines con el modelo que elijas. Te llevará muy poco tiempo cogerle el tranquillo y enseguida prepararás unos platos deliciosos, variados y sanos.

    ¡Buen provecho!